El Lobo volvió a casa donde fue anfitrión de la Lepra rosarina, en el marco de un duelo importante tanto para ambos conjuntos. A lo largo de los primeros 45 minutos el elenco dirigido por Hernán Darío Ortiz intentó lastimar a su rival, y quien más cerca estuvo de lograr el objetivo fue Víctor Ayala, con tres tiros libres que a poco estuvieron de abrir el marcador. Durante ese lapso, los rosarinos contaron con remate de Alexis Rodríguez que controló Sebastián Moyano.

Para el inicio del complemento el entrenador Mens Sana decidió mover piezas y dispuso el ingreso de Horacio Tijanovich en lugar de Brian Mansilla, clave para el desarrollo final del cotejo. El equipo conducido por Héctor Bidoglio se adelantó varios metros en el campo, pero se topó con una defensa de Gimnasia sólida que impidió jugadas concretas de peligro.

En la faceta ofensiva, el Lobo buscaba pero no podía dar con la jugada que le permitiera ponerse arriba en el marcador. Sin embargo, a los 48 minutos, en el último suspiro del juego, llegó la acción que decretaría el desenlace final.

Jesús Vargas comenzó a encarar de derecha a izquierda y una vez posicionado cerca de la medialuna abrió el balón hacia Lautaro Chávez. El joven correntino envió un centro de zurda que, en dos tiempos, Tijanovich controló y remató con destino al segundo palo de Alan Aguerre quien nada puso hacer para evitar ni el gol ni el estallido del pueblo Tripero que, a viva voz, gritó el 1-0 que terminó siendo definitivo.

De esta manera, Gimnasia sumó tres puntos valiosos y llegó a 25 unidades en la Superliga y, desde el sábado entrenarán con la mente puesta en Defensores de Belgrano de Villa Ramallo, conjunto al que enfrentará el jueves 21 de marzo, en Santa Fe, por la Copa Argentina.

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