Escuela Secundaria

En la Secundaria Favaloro los lápices siguen escribiendo

Escuela Secundaria, 18/9/2019

Por: GELP

En un emotivo acto la Escuela Secundaria Dr. René G. Favaloro, conmemoró el 43º aniversario del dramático acontecimiento generado por la dictadura cívico militar, conocido como “La noche de los lápices”.

Imagen de la novedad

Durante el acto, la Profesora de Política y Ciudadanía, Natalia Maihuire Hirache, compartió una reseña con los alumnos de todos los cursos, en la que contextualizó y recordó uno de los momentos más crueles vividos en la historia de La Plata y del país.

Además, alumnos de 6to año leyeron la nómina de los estudiantes secundarios de entre 13 y 18 años que fueron secuestrados y desaparecidos.

Para finalizar el encuentro, Maihuire Hirache recordó que el 18 de septiembre se cumple un nuevo aniversario de la desaparición de Jorge Julio López.

A continuación, compartimos las palabras de la Profesora.

En el día de ayer se conmemoró en la ciudad de La Plata como en tantas otras ciudades un nuevo aniversario de lo que se conoció como La noche de los lápices, llevado adelante por la última dictadura Cívico militar clerical

 En la noche del 16 de septiembre de 1976 y durante días posteriores 10 estudiantes de secundaria fueron secuestrados por orden del Batallón 601 del ejército dirigido por el general Camps y Etchecolatz

Esta fecha que sintetiza los elementos más crueles se transformó en el símbolo de la represión militar, el objetivo era desarticular la actividad política y eliminar a quienes cuestionaron el orden político militar establecido.

Estos jóvenes fueron sujetos activos de una de las luchas más reconocidas como es la conquista del boleto estudiantil, pero sin embargo su posterior secuestro tiene que ver también con la militancia barrial que ellos y ellas realizaban peleando por una patria más libre justa y soberana con la convicción de que es posible su transformación y que ello nos exige nuestra activa participación.

Es necesario recordar aquellos y aquellas que con su lucha que le llevó la vida.  Hoy conmemoramos el día de los derechos de los estudiantes secundarios

Retomando las palabras de Emilce Moler: el pasado todo el tiempo se está colando en nuestros presentes.

El saber y el conocer lo ocurrido, mantener la memoria colectiva es condición necesaria pero no suficiente. debemos incorporar el aspecto político a nuestra historia para romper con las versiones que intentan reducir que lo ocurrido fue solamente por unos jóvenes idealistas.

Debemos dejar de recordar como Desaparecidos – esa categoría instalada por Videla- y recordarlos en cambio por Quiénes fueron y qué hicieron.

Por último, no quiero dejar de mencionar que en el día de mañana se recuerda el decimotercer aniversario de la segunda desaparición de Jorge Julio López testigo clave en el juicio contra Etchecolatz.

En la secundaria René Favaloro los lápices siguen escribiendo.

El emotivo recuerdo también se compartió el poema ‘’Semilla de resistencia’’ de Camila Rodríguez

Semilla de resistencia

Los veo mudos, incoloros, detenidos en el tiempo, viviendo eternamente en una fotografía vieja. 

Recorro los pasillos de aquel lugar en donde te arrebataron la vida. Aquel lugar frío penetró mis carnes.

A medida que caminaba por las marcas de tu vieja celda, el frío se alojaba en mis huesos. Y aquellas historias que contaban cómo resistías generaban en mí una leve sonrisa apagada.

 Sigo recorriendo los pasillos de aquel lugar en donde las bestias de uniforme alimentaban sus entrañas con la vida de algún joven luchador. 

Observo a mi alrededor. El tiempo parecía haberse detenido. Ya el viento siquiera hacía sonar los árboles. 

Mis lágrimas impotentes de bronca contenida se cristalizaban y estallaban contra el suelo en donde vos estuviste. Sigo caminando por los pasillos y el silencio pareciera aturdirme. Ahora todo está calmo, vacío, gris. 

Pero antes de irme vuelvo a ver tu rostro irradiando felicidad, detenido en el tiempo, viviendo dentro de los marcos de una fotografía. Levanto la vista y observo a todos mis compañeros irradiando fuerza en sus pupilas. 

Y esta vez nadie se robará tu voz, ni intentará corromper tus esperanzas. Porque habitas en cada uno de nosotros. Porque esta vez nosotros cuidaremos de aquel frágil brote que vos plantaste hasta verlo convertirse en árbol fuerte, irradiando belleza, sacudiéndose con una fresca brisa de libertad. 

Ahora al salir de las sombras del esqueleto de aquel edificio, pisamos con mucho más ímpetu y más seguridad.

Porque nos protege tu voz y nos abrigan tus brazos.

 

Más noticias

Noticias relacionadas

Más noticias de este deporte